Carboxiterapia: tratamiento corporal para estrias y cicatrices

TRATAMIENTO CORPORAL

Estrías y cicatrices

El objetivo es despegar la zona para que vuelva a cicatrizar, en condiciones óptimas, aumentando
su nutrición y oxigenación. La carboxiterapia está indicada tanto en las estrías de la gestación como en las de las mamas, ya sean jóvenes, antiguas, blancas, rojas, etc. Todas se verán beneficiadas en mayor o menor medida. Se debe realizar la técnica estría por estría y hacer un despegamiento de los planos dérmicos lo más superficial posible.

El flujo que se ha de emplear será de 80 a 90 mL/min continuo. La hiperemia aparecerá i n mediatamente
y será de corta duración, desapareciendo tras la sesión. Es una técnica dolorosa y
han de tratarse todas las estrías en una sola sesión. Hay que dejar que el gas difunda a lo largo de las
mismas y hacia aquellas que están más próximas. Se tratan las zonas limítrofes sanas para que participen
en el proceso de cicatrización, llegando hasta más allá del final de cada estría. La ausencia de puntos sangrantes indica que se ha realizado el tratamiento superficialmente y de forma correcta.
Posteriormente se masajea con gel calmante. Las estrías rojizas presentan una resistencia
mayor que las estrías envejecidas, y son más dolorosas. La mayoría de las complicaciones están
relacionadas con una mala técnica. N o hay que olvidar nunca purgar el sistema con 20 a 30 mL
por cada flujo existente, de esta forma se elimina el aire comprimido de cada válvula.
Es recomendable realizar dos sesiones por semana en plano muy superficial, con un mínimo
de seis aphcaciones. Como cualquier otra de las indicaciones de la
carboxiterapia, se puede asociar otra técnica, en este caso la intradermoterapia con sustancias revitahzantes. En el domicilio el paciente usará una crema exfoliante, como una crema de ácido mandélico
en días alternos y una adecuada hidratación el resto de los días. El tratamiento no quirúrgico de
las cicatrices no debe reducirse a una sola técnica. La carboxiterapia usada con los mismos parámetros
que para las estrías en planos intradérmico e intermedio para romper áreas de fibrosis puede
ser un buen complemento al intradermoterapia u otros recursos terapéuticos al alcance del médico estético.

Adiposidad localizada

Es de elección en los protocolos médicos emplear, en este caso, la carboxiterapia unida a la hidrolipoclasia, sobre todo en pacientes delgadas con focos de grasa localizada fibrosados o encapsulados.
Con la unión de ambas técnicas se pueden obtener resultados visibles a corto plazo, sin olvidar que la adición de otras terapias clásicas es un buen complemento para alcanzar los objetivos fijados.

Se analiza al paciente, determinando los puntos donde existen más acúmulos de grasa y fibrosis,
y se toman los perímetros epigástrico, de cintura, reglón umbilical y región hipogástnca, así como el perímetro de cada muslo. N o hay que o l vidar el peso y el índice de masa muscular y grasa.
A continuación se debe realizar el marcado del paciente, siempre en bipedestación, para evitar
que el decúbito modifique las zonas diana. Se continúa con la infiltración con suero fisiológico
para hidratar la región donde se va a infiltrar el CO2, lo que provocará la disminución del
p H en dicha zona, aumentando la capacidad de lisis de la grasa, como ya comentamos en los mecanismos
de acción. La infiltración del suero f i siológico puede también realizarse simultáneamente
a la administración de CO2.

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